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Cuando ser perfeccionista es un problema para tu negocio

Cuando ser perfeccionista es un problema para tu negocio

El ritmo de vida de un emprendedor, demanda cada vez más prisa, más eficacia y más resultados en menor tiempo. El bienestar en la vida suele encontrarse en alcanzar un punto medio en la gran mayoría de cosas, pero esto nos obliga a querer hacer todo, no tener tiempo para nada y la perfección parece convertirse en una meta a la que debemos llegar, cueste lo que cueste. 

Sin embargo, la perfección no siempre es perfecta, pues en varias ocasiones y en contra de lo que muchos creemos, puede traernos más inconvenientes que ventajas para nuestra salud y la de nuestro negocio. 

Según Fernando Miralles, de la Universidad CEU San Pablo, «una persona perfeccionista, es aquella que en todo momento está sufriendo y fomenta su inseguridad, ya que quiere llegar a una perfección tal que, o cree que la consigue o no dará por terminada la acción que realiza. Lo normal es que pierda tanto tiempo en realizar acciones cotidianas que tenga que descuidar su vida personal.»

Josefa Perez, Presidenta de la Asociación Nacional de Psicólogos Clínicos y Sanitarios (ANPCS) de México, asegura que «el perfeccionistmo, en extremo, suele dar lugar a comportamientos demasiado rígidos o controladores. Los perfeccionistas sienten una gran presión que les produce mucho sufrimiento: nunca están conformes con el resultado de sus acciones y rechazan cualquier error o imperfección, relacionándolo con una falta de valía personal».

Ahora, te has preguntado ¿cómo este comportamiento puede afectar tu trabajo y la forma en que guías tu empresa? ¿está afectando tu perfeccionistmo tu emprendimiento? ¿puedes ser perfeccionista de una forma positiva para tu negocio? 

Ser perfecto ¿un problema? 

Los medios y redes sociales promueven la perfección en todos los ámbitos de la vida, en la apariencia, en el desempeño laboral, el matrimonio, la familia, los viajes, son puestos con imágenes idealizadas, y fijan estándares de «como deben ser» las cosas, si tu vida no se ve así, estás fallando. 

Lo mismo haces con tu negocio, lo pintas de una forma tan perfecta e ideal, que cuando las cosas no salen como lo planificas, te frustras, y empiezas a dedicarle tiempo y dinero a tener la empresa perfecta, todo pareciera alcanzable con esfuerzo y motivación, pero existe en realidad el negocio perfecto. 

La verdad es que hacer las cosas bien hechas, dándole un extra, agregándole valor a todo lo que haces, es la «situación perfecta» y tu equipo debe buscar la excelencia, pero ser excelente en tu trabajo, no significa ser perfecto. La perfección no existe y buscarla, sobretodo con un negocio, sólo causara frustración al emprendedor que hay en ti, te sobrecargará de trabajo porque perderás la capacidad de delegar creyendo que sólo tú puedes hacer todo. 

Señales de alerta

A qué señales debes prestarle atención para que tu búsqueda de la perfección no afecte de manera negativa a tu empresa:

  • Ansiedad desmedida ante presentaciones con clientes, quieres controlar todo, de forma desmedida, incluyendo la reacción del cliente. Si cada vez que te toca presentar una propuesta a ti o alguien de tu equipo, se genera más ansiedad que productividad, deberás analizar si realmente estás buscando ser excelente en tu trabajo o estás buscando un estándar que no existe. 
  • Planeas en exceso, todo y cada uno de los movimientos de tu empresa están planeados sin márgenes de error; esto es negativo, si tu planificación reduce la creatividad, es decir, si por planificar todo, no dejas que tu equipo aporte ideas, presente nuevas propuestas y formas de trabajo «outside the box» porque no están dentro del programa, estás estancando no solo el trabajo, si no que crearás un ambiente de trabajo en línea recta y una zona de confort a tus colaboradores, de la cual no necesitarán salir, y por tanto estancarás todo el proceso productivo. 
  • Pospones los proyectos hasta estar listo, cuando te planteas nuevos proyectos o estás a punto de lanzar una nueva estrategia de marketing, lo postergas hasta estar seguro que cada detalle está impecable; esto puede significar que tu empresa pierda no sólo el tiempo, si no dinero por no aprovechar el momentum de determinada moda, o época del año para comercializar. Está bien ponerle todo el esfuerzo a los nuevos proyectos y ponerle toda la atención para planificar nuevas estrategias, pero ningún plan es perfecto, y nunca te sentirás 100% seguro de tus decisiones, hasta que no pruebes si dan resultado o no. 
  • Tu equipo no te respeta, te tiene miedo. Uno de los grandes problemas de ser perfeccionista y ser el líder de un proyecto, es que te vuelves en ese líder dictador que no acepta errores, pero tampoco acepta consejos de nadie; esto provoca que tu equipo de trabajo tenga temor de consultar contigo, no siente empatía, y es muy difícil que se ponga la camiseta de la empresa y se sienta identificado, porque lejos de tenerte lealtad, tus colaboradores querrán mantener la distancia. 

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¿Cómo combatir el perfeccionismo para que no afecte mi negocio?

1. Libérate del «¿qué dirán? 

Si tomas en cuenta que tu empresa es fruto de tu trabajo para cumplir tus sueños, la misma está diseñada por ti, que eres la única persona que realmente puede medir si eres un emprendedor exitoso o no. Si buscas la perfección por complacer a los demás o por demostrarle a alguien que puedes hacerlo y no porque es tu pasión, caerás en la agonía de tratar de cumplir estándares fijados por otros, para alcanzar una perfección que no existe. 

2. Recuerda: tu capacidad de emprender no depende de los resultados de tu último proyecto

Muchas veces, aunque demos lo mejor de nosotros, un proyecto puede o no funcionar, podemos tener todas las estrategias, inversión, equipo capacitado y aún así existe la probabilidad de que el proyecto no de los resultados que esperamos. Vivir con la presión constante que todo tiene que salir a la perfección es paralizante, improductivo y afectará tu salud, especialmente creará en ti una impotencia y sentimiento de fracaso, que te impedirá emprender. 

3. No emprendas a lo loco

Si no quieres sentir la presión de no fallar, tienes que dar pasos seguros; antes de iniciar tu negocio debes tomarte el tiempo de analizar todo lo que conlleva ser emprendedor, debes tener clara tu misión, visión, objetivos, valores, estrategia de marketing , debes investigar sobre las herramientas que necesitas, tu página web, crear tu marca personal, definir tu buyer persona, buyer journey y prepararte sobre el tema, estudiar el mercado, hacer tu análisis DAFO, PORTER, PESTEL, y con todo esto lograrás realmente establecer metas para alcanzar tus objetivos, que sean grandes pero alcanzables, toma en cuenta que lo perfecto es enemigo de lo posible. 

 

 

Lo importante es que, el emprender te da la oportunidad de fijar tu ritmo, tu visión, establecer qué quieres lograr, como alcanzar la satisfacción de tus clientes, pero que también tu negocio sea rentable y logres vivir de tu pasión. Si quieres alcanzar un estándar de perfección impuesto por el mundo, no lo lograrás nunca, tu pones tus límites y al mismo tiempo construyen la escalera para alcanzarlos. No trates de ser perfecto, sé el mejor en lo que haces, que todos te reconozcan y aprecien tu trabajo, eso es lo que hará tu empresa exitosa.